Cuando la muerte nos sorprende…

 Autor: José A. Echevarria

Te ha llevado una enfermedad del lado de nosotros, te ha robado la vida entera dedicada a tu pueblo, te tendremos siempre como mismo ha pasado con Martí, Bolívar, Sucre y todos los héroes que dieron sus vidas por esta Latinoamérica que tú ayudaste a construir donde quieras que ibas.

Hoy estamos de luto pero a la vez estamos agradecidos de poder compartir la vida en estos años, me siento agradecido por coincidir contigo en nuestra existencia. Comandante Chávez, serás siempre recordado por este revolucionario toda la vida y por todos aquellos que de una forma u otra ayudamos a que un mundo mejor es posible gracias a tus ideales revolucionarios.

Era yo un niño cuando los sucesos del año 1992, quienes bajo tu mando tuvieron la impetuosa decisión de un golpe de estado que fracaso pero no te freno el futuro, vendrían años de cárcel por tu defensa de la igualdad del pueblo venezolano, pasaste noches oscuras meditando de cómo sacar de Venezuela a esos aprovechadores y que desangraban al país de todas sus riquezas.

Chávez, un hombre para la historia que ya les provocaba histeria a los gobernantes estadounidenses que veían en ti lo que llegaste a ser con tu ferviente lucha. Ganaste las elecciones de 1999 y nadie te paro en el tramado golpe de estado que realizaron contra ti, todos vivimos horas de tensión y anhelo cuando te vimos desembarcar triunfante en el Palacio de Miraflores ante un pueblo que exigía por el verdadero y único presidente que ellos habían elegidos.

Enfermaste, pero tu lucha siguió adelante en todo momento y hoy más que nunca seguiremos el legado y las ideas con el ejemplo vivo de tu labor diaria contra esos que no creen ni desean que un mundo mejor sea posible.

Estaremos siempre dispuestos en cada lugar del mundo a defender lo que nos enseñaste, a predicar el amor a todas las acciones buenas que hagamos en aras de nuestro pueblo y todos los coterráneos del mundo.

Chávez, tú vives, eres el aire que respiramos y la brisa que nos da a diario la frescura de seguir en pie de lucha ante cada injusticia. Fuiste y serás siempre la guía para todas las personas honestas de este mundo.

En una frase Martiana resume todo lo que eres “Héroe se puede ser todos los días; pero el verdadero héroe es el que sacrifica su heroísmo al bien de su patria” y tú lo fuiste para un mundo lleno de necesidades, lo fuiesta para los pobres de tu tierra y de nuestra América.